Heavenletter # 4409. El Único Dios

Dios dijo:

Nunca te he abandonado. Es posible que te hayas alejado de ti mismo, pero nuca me he alejado de ti. Te di vida. Te puse en tu camino. Nunca te he dejado. Siempre He estado justo a tu lado. Nuca Me He desviado de ti. Hay algo que estás buscando y aún no lo tienes al alcance de tu mente. De aquí que pienses que estás extrañando algo.

Hay algo en ti que te lleva a mirar fuera de ti. Me buscas fuera de ti. Buscas pruebas Mías, y te estás despojado cuando no las encuentras. Incluso puedes pensar “Dios me ha traicionado. Ciertamente me ha defraudado”

Amado, has mirado abajo, y has mirado arriba. Has mirado en todos lados para encontrarme. Te otorgo eso. y aún así, ¿qué significa que el Reino de los Cielos está en ti? Significa que es ahí donde me encontrarás. Sí, dentro de ti. Eres quien me Lleva. Soy aquella tranquila voz en tu interior. Yo te grito. “Encuéntrame, encuéntrame”. Durante todo el tiempo que estás murmurando: “Dios, ¿donde estás?”

Con frecuencia parece que en lugar de buscar pruebas de Me y de Nuestro Amor, estás buscando pruebas de lo que no soy. “Ajá”, podrías decir. “Ves, no estás aquí. Demasiado para ti, Dios. Eres una grandiosa idea, sin embargo Tu no me has mostrado tu rostro”.

Y Yo te digo: “No puedo decir que debes mirarte a la cara. No soy tu rostro. Puedes Verme en tus ojos, de todas formas. Así que mira en tus ojos, y encuentra tu mirada. Yo existo en ti. Yo estoy contigo. No estoy oculto. Eres tu quien se oculta de Mí. Hay algo de pícaro en ti que rehúsa reconocer la profunda riqueza que es tuya, poderosamente tuya, tuya siempre y por siempre . tuya”, Yo digo.

Saliste para dar un paseo y olvidaste el camino de regreso y, aún paseas o merodeas buscando aquello que estás seguro te pertenece, que tu eres actualmente incapaz de reclamar. Tu nombre está escrito sobre eso, con todo extrañas lo que está justo en frente tuyo, en lugar de lo que está dentro de ti. Te pertenece. Es tuyo. Yo me di a ti. Agito mi mano, y grito, “aquí estoy, justo aquí”, y palpito dentro de tu pecho y tu no Me escuchas. Puedes pensar que estás teniendo palpitaciones. Deja de diagnosticarte y simplemente abre tu corazón y tu mente a Mi. Estoy llamándote.

De alguna forma debes haber obtenido la idea de que debo presentarme a ti. Yo me presenté a ti desde el principio. De alguna manera parece que sientes que presentarte a Mi es renunciar a ti mismo. Bien, continúa. Gira hacia Mi. Renuncia a tu testarudez. Concede. Admite Mi amor que está almacenado dentro de ti. Sácame fuera del almacén. Me has mantenido oculto de ti demasiado tiempo.

Acepta que Yo soy Uno contigo. Así que Tu eres Uno con Migo. Puedo bailar frente a ti, tratando de obtener tu atención. Yo señalo dentro de ti y dices que estoy ausente. Tu, amado, has estado ausente de mente y de corazón. No rechaces mi presencia en ti por más tiempo.

¿Donde podría estar sino dentro de ti? Nunca estaría sin ti y tu nunca estás sin Mi. Yo te acompaño. Yo Soy. Existe uno de Mi y ese eres Tu. Yo resido en ti. Es tiempo ahora de dejar de buscarme fuera de ti. Aquí, aquí estoy, justo en tu corazón. Yo espero tu reconocimiento de Dios, Quien te ama sin importar lo que digas. Tu no sabes mejor que Yo. Tus pensamientos vagan en algún lado. Eso es todo lo que ha ocurrido. Conóceme, Conócete a ti mismo.

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