Dios dijo:

Sí, tienes que salir del hábito de pensar pequeño. De una vez por todas tienes que salirte de las reacciones aprendidas que has hecho tuyas y que te causan frustración. ¡Cuánto mejor sería la vida si tan sólo pudieras salir de tu resentimiento e ira sobre las cosas pequeñas!

Yo te ayudaré. Voy a entrenarte. La única cosa es que debes llegar a una mayor comprensión tú mismo.

Digamos que, por tercera vez en tres días, el robot de una compañía te ha enviado una respuesta a tu sincera pregunta. La respuesta es no recibir una respuesta. El robot no tiene ni idea de lo que estás hablando. El robot no tiene una pista. Y el robot programado no se desanima. El robot señala alegremente que estará encantado de responder a tus preguntas en cualquier momento. Así de ciego e indiferente es el robot que te sientes frustrado de manera increíble. A veces, un cuerpo vivo es como el robot computadora que no te escucha. No importa lo que digas.

Queridos, ustedes tienen la costumbre de frustrarse. Desde la infancia, es posible que hayas sido desechado y no escuchado. No ser escuchado es lo mismo que ser anulado. Ser ignorado es un anatema para ti. Estás tan enojado por haber sido ignorado. Por supuesto, no es correcto. Cada uno de Mis hijos merece ser visto y escuchado y, francamente, adorado, y no ignorado.

Sin embargo, la infancia no siempre ha sido todo lo que está destinada a ser

Así que, ¿cómo te conviertes ahora en el ser humano que quieres ser? Los desaires en la vida siguen apareciendo. El resentimiento y la ira se mantienen siempre tan irritantes como una mosca que regresa una y otra vez a molestar y atormentarte.

Tu molestia se vuelve como matar moscas. Tu mente y la superficie de tu corazón están listas para atrapar esas moscas que no tienen derecho a mantenerse zumbando a tu alrededor. Y, sin embargo, aquí están, y te tomas su zumbido como algo personal.

Cuando una empresa tiene robots respondiéndote, no hay matamoscas con los cuales atraparlos. Un programa computarizado te pone a dar vueltas, y romperías a ese robot si pudieras. Este es el peor tipo de falta de respuesta en el mundo que puedas imaginar. Ser ignorado, ser totalmente ignorado, ser bruscamente malinterpretado sin tener una escucha justa.

Don Quijote luchó contra molinos de vientos. Tú luchas contra robots computarizados.

Una vez, fuiste un niño indefenso. Ya no eres un niño indefenso. Ni siquiera las respuestas sin sentido de una máquina tienen ningún poder sobre ti ahora excepto que lo que concedas. Y te mantienes concediéndolo.

En algún momento, declaraste la guerra a títeres. Los títeres son inocentes. Otra persona habla por ellos, y tú eres el que se enoja con el títere.

Vociferas al pasado en cualquier forma que se presente. Mientras que otros pueden haber caído en la trampa de ignorarte, tú, querido corazón, ahora debes aprender a soltar el pasado y simplemente dejarlo ir. Incluso en aquel entonces, era problema de los ignoradores, no el tuyo. En aquel entonces, no podías saber eso. Ahora ya lo sabes. Los ignoradores son ignorantes.

El pasado no es nada. Este momento lo es todo. No mantengas el pasado presente. Sal intacto del pasado. Hay resentimiento desde hace mucho tiempo. No lo mantengas vivo.

¿Cómo salen de la esclavitud de no ser escuchados? Escúchenme, amados. Escúchenme, y sus barreras internas a la paz se derrumbarán. Caminen hacia adelante seguros en la atención y en el amor en el que Yo les sostengo.