Dios Habla
(God Speaks)
Heavenletter #1 Published on: November 17, 2000

Dios dijo:

Hoy se sentarán, serán receptivos y aprenderán.

Hoy se van a poner a ustedes mismos de lado y Me escucharán.

No necesitan más sus agendas.

Nacieron apegados a sus madres para que pudieran desapegarse y aprendieran su Unidad conmigo. No tienen que ir a ninguna parte. No tienen que distanciarse. Se separan para aprender que no hay separación. Sólo tienen apego a la separación.
Han estado apegados a su individualidad, y ahora abrirán campo para Mí.
Todos ustedes son puros receptáculos de Mi amor.
Los receptáculos son recipientes. Un recipiente recibe y contiene, no para guardar, sino para ser vaciado.
Como un recipiente de Mi amor, ustedes Me derraman. No tienen mucho que hacer. Solamente tienen que doblarse un poco, inclinarse un poco y Mi amor fluirá por Sí mismo.
Sí, ustedes serán un puro receptáculo de Mi amor.
Puro no significa lo que ustedes piensan. No significa que ustedes son perfectos a los ojos del mundo, que ustedes comen comida perfecta, se comportan perfectamente. Ustedes, por ustedes mismos, no se pueden comportar lo que ustedes llaman perfectamente, porque la individualidad a la cual están apegados sabe muy poco y entiende aún menos.
Hoy van a ir más alto. Hoy van a dejar su pasado atrás. Ustedes ya no dependerán tanto de su pasado por más tiempo. Ustedes están abriendo camino para Mí, y para hacerlo, ustedes (eso que ustedes imaginan que son) deben apartarse del camino.
Eso es todo lo que tienen que hacer. Apartarse. Entonces ustedes Me permitirán pasar.
El receptáculo piensa que él es el dueño de su contenido. Pero un receptáculo no es un dueño. Él es un transmisor. Él contiene solamente para transmitir. Los contenidos no son para él mismo. Un receptáculo está sereno y listo para entregar lo que contiene. El receptáculo no retiene sino que deja ir.
Soy la Pureza.
Y ustedes se convierten en la pureza del amor que ustedes deben ser dejando de lado su sentido individual de pertenencia. Su individualidad, que ustedes valoran tanto, los detiene. Ustedes piensan que es su importancia, pero es su prueba y su tribulación. Ustedes piensan que es su entrada, pero está bloqueada con sus apegos.
El individuo no quiere cambiar. Él puede decir que quiere. Él quiere que lo que está alrededor de él cambie tal vez, como él lo ve es algo adecuado, pero realmente él quiere aferrarse a sí mismo como es, o como él piensa que ya es. Quiere capturar el mundo para sí, más que abrirse a sí mismo hacia el mundo.
No se aferren más.
En cambio, permítanme entrar y entregarles el amor que han estado almacenando para Mí.
Hoy salgan del camino de ustedes mismos.
Ustedes no son el tema.
Yo soy el tema.
El mundo de la vida es Mío.
Ustedes han estado rodeando el mundo.
Ahora les digo que entren.
Y entren como vinieron.
Vinieron sin nada excepto conmigo. Vinieron con Mí fe en ustedes. Ahora ustedes aprenden su fe en Mí. Sean inocentes.
No vinieron con maletas. No se aferraban. Su mano estaba abierta, y así ustedes tenían todo para dar.
Ustedes todavía lo contienen todo. Todo está contenido en ustedes. Pero ustedes buscan afuera para llenarse. Ustedes ya están llenos. Me tienen en su interior. Conozcan esta verdad. Dejen que Mis pensamientos sean los suyos.
Hoy despierten a su carácter sagrado.
El egoísmo es una falsedad.
No es la verdad.
Hoy ustedes están aprendiendo lo que Hágase Tu Voluntad significa.
Actualmente, ustedes cavan la tierra con sus dedos y todo el tiempo hay un gran motor a su disposición. Cavan con un palo cuando sólo tienen que permitirme abrir la tierra. Ustedes dibujan fantasías con su palo y se quejan de lo que idearon y lo cuestionan y se preocupan por eso desde todas las direcciones y piden todos los análisis y descripciones de eso de modo tal que su voluntad pueda ser realizada, y, todo el tiempo, su voluntad es un pequeño palo.
Únanse a Mi Voluntad y vengan a un lugar más amplio y superior de gran Verdad y gran Amor. ¿Realmente piensan que lo finito puede superar a lo Infinito? No se apeguen a su pequeño mundo. Ábranse al Mío. Ábranse al Cielo, porque yo lo vertí en ustedes.