Dios dijo:

Amado, hoy puedes tener la sensación de que algo viene por ti a la vuelta de la esquina. No sabes exactamente qué, pero sientes que se dirige directamente hacia ti. Apenas puedes esperar. Es algo que claramente te agrada. De hecho, corres a tu computadora en caso de que un correo electrónico bendecido ya haya llegado.

Eres consciente de que un enfoque sencillo y sin intervención de la vida en general es más efectivo que un enfoque insistente.

No quieres ahuyentar las buenas noticias. Después de todo, las buenas noticias adicionales generalmente vienen cuando están bien  y listas. Tu papel en la vida no es el de un cobrador de deudas.  Serás un receptor feliz en lugar de uno impaciente que parece exigir de la vida. "¿Dónde has estado? ¿Qué te tomó tanto tiempo?”

Lo entiendes. Hay un equilibrio sutil que se debe mantener. Estás encantado de recibir la vida tal como viene, sabiendo bien que la vida tiene en mente tus intereses y que siempre te cuida. No quieres ser tomado por un cliente iracundo. Todo está bien. Puedes hacerlo. Puedes tomar la vida tal como viene en sus propios términos.

Es posible que hayas tenido un sueño de la nada, un sueño inexplicable sobre unos viejos amigos tuyos, se da el caso, una pareja maravillosamente casada que siempre fueron amigos tuyos el uno con el otro. En la vida real, la pareja se había mudado a California hace años. En este sueño, tú y la pareja han estado haciendo negocios juntos y no sólo eran amigos. En este sueño, llegan a tu puerta con paquetes relacionados con el negocio (para ti). Tus amigos te han traído algunos productos. En el sueño, este fue un gesto agradable pero también algo confuso.

De todos modos, no sueñas con la interpretación de los sueños. Quieres que tus sueños conocidos se hagan realidad. ¿Por qué tendrías tus grandes sueños si no se hicieran realidad? Deseas que lo auténtico se haga realidad delante de ti. La especulación no te satisface. 

Me pides: "Dios, vamos a ello. No más retrasos. No más conjeturas salvajes."
 
Tus sueños favoritos que realmente se hacen realidad, te han llegado en muchos casos como sorpresas.

 En retrospectiva, puedes ver algunas señales. En una visión a largo plazo, podrías haber predicho algunos aspectos de tu vida, pero no todos. Y también te das cuenta de que si hubieras sabido de antemano, aún así, no podrías estar seguro de que lo harías mejor que ahora. Eres consciente de que lo que tienes que hacer ahora es estar feliz de haber recibido todo lo que se te ha presentado No importa lo que hubieras dejado fuera si hubieras podido.

En general, lo hiciste bastante bien. Y sí, si pudieras hacerlo todo sabiendo lo que sabes ahora, ¿realmente lo hubieras hecho de manera diferente? Realmente tienes un deseo claro, y es que te gustaría haberte apreciado mejor en  todo momento.

Ahora también entiendes que nada es en vano. Incluso si no hiciste una maravilla de un día, lo hiciste genial. Esta es tu vida que viviste y, de hecho, la viviste. La has llevado hasta ahora. Incluso puedo oírte decir:
 
“Gracias, Dios, por quedarte a mi lado. Me acompañas a través de las aguas poco profundas y las alturas. Ahora mismo, Dios, no veo qué es lo que sucederá. Lo que sé es que  estarás conmigo de la mano, y yo conoceré  la gracia que ves en mí, y la conoceré bien. Llévame a donde quieras, Dios, y gracias por el viaje. Donde sea que conduzcas, es donde quiero estar Contigo."

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