Dios dijo:

¿Qué somos realmente, el así llamado tú y el llamado Yo? Si somos Uno, ¿dónde estás entonces? ¿Y qué eres tú sino Mi Ser?

¡Cómo anhelas ser Yo, y sin embargo cómo anhelas mantener los restos de tu pequeño yo exterior al mismo tiempo! ¡Qué precioso eres para ti mismo!

A veces usas túnicas reales, y a veces vistes harapos. Me refiero, por supuesto, a cómo te presentas ante el mundo y cómo el mundo y tú pueden pasar por alto tu Esplendor. A menudo te encuentras en el mar, ya que nadas en múltiples direcciones de ida y vuelta y muy a menudo flotas de espalda. Afortunadamente, tienes el Cielo hacia el cual mirar.

Lo quieres Todo. No quieres convertirte en una conclusión olvidada o no. Honestamente, tu personalidad limitada es muy preciada para ti. Recuerdas tu yo personal como dulce, incluso mientras lamentas tu presentación de ti mismo en el mundo. Incluso te ves en contra de cómo interactúas con el mundo. Te pones en una escala y pesas lo que estás haciendo, como si lo que estás haciendo fuera la suma de ti, como si un enfoque fuera toda tu historia.

Te ves cometiendo errores en el mundo más de lo que puedes soportar. Puedes alabarte a ti mismo mientras sigues horrorizado de ti mismo. Querido, es posible que pierdas tus señales. ¿Y si no te midieras en una escala en absoluto y no te encontraras deficiente, qué te parece eso?

Tengo que preguntarte: ¿Por qué aferrarte a las percibidas apariciones del pasado? Tú acumulas el pasado en el pasado mientras digo: Lo pasado pasado está.

¿No es la frase "lo pasado, pasado está" mucho mas encantadora que la palabra pasado? La frase lo pasado pasado está presenta una imagen más clara. No llamaremos al pasado un vuelo por noche, pero podríamos hacerlo. Podríamos hacerlo.

Mientras estás alojado en tu cuerpo, tú que eres sin embargo Eterno, pareces insistir en descartar la posibilidad de Quién realmente eres, y por lo tanto puedes optar por jugar y mantener tus ilusiones. Tus ilusiones no son lo suficientemente altas. Puedes tender a rebajarte a ti mismo mediante la aceptación de menos, tal vez incluso olvidando que no estás simplemente cruzando el agua sino que estás destinado a volar alto en las Alas de la Posibilidad.

Juras que el tiempo avanza y te deja atrás, como si no tuvieras nada que decir sobre quién eres.

Si te encuentras en un barco, camina por la borda. Usa tus binoculares, y verás más y bailarás al son de Mi Melodía.

Aspira. Aspira más allá del mundo cotidiano. Estás seguro de que estás basado en la Tierra y eso es todo, mientras que Yo te digo una y otra vez que tu base está en el Cielo donde casi no te atreves a creer, como si en el Cielo, estarías perdido.

Métete esto en tu cabeza. Sólo en la Tierra hay decisiones de esto o aquello que tomar. Este es tu dilema. Te pones en un lugar mientras que, en Verdad, todo el Reino es tuyo. Ciertamente, Yo creé la Tierra, pero la Tierra es también tu creación. Tú giras la rueda, y cómo la giras es la disposición de la tierra. Está la Tierra, y en la Tierra, hay personas, y las personas son los Capitanes de la Tierra. Eres un Capitán de la Tierra. A medida que vas, así va la Tierra.

Creé un Milagro cuando te creé. Yo creé tu Amor. Ama y crearás tus propios Milagros. Yo digo, "¡Ya es hora!"

La Fe en Mí no significa que te sientas por ahí y esperas a que Yo actúe. La Fe en Mí significa que te levantas y entregas tu Amor a los cuatro rincones del mundo y más allá. Regala tu Amor por todo el mundo. Hala al mundo hacia el Cielo. Hálate a ti mismo hacia el Cielo. Sube estos escalones. Entrégate al Cielo. No hagas ningún comentario sobre dónde se encuentra tu jurisdicción, porque tu jurisdicción está en todas partes.

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