Heavenletter #3361 ¿Qué Queremos Hacer en este Corto Tiempo en la Tierra?
¿Qué Queremos Hacer en este Corto Tiempo en la Tierra?
Nº 3361 – Febrero 6, 2010
Traducción: Cristina Caffaro
Edición: Anita – wayran [at] gmail [dot] com
Dios Dijo:
En tiempos antiguos se decía que ustedes temblaban al verme u oírme o siquiera percibir una sombra de Mí. Se decía que temblaban de asombro. Quiero estar seguro de no era el miedo lo que los hacía temblar. Ni siquiera quiero que tiemblen de asombro. El asombro parece implicar que estoy lejos, fuera de ustedes. Parece implicar que estoy muy alto por encima de ustedes, que ustedes fueran una cosita diminuta por debajo de Mí. Temblar señala una gran separación. No quiero que trepiden ante Mí. No hay nada que temer en Mí.
Hay una gran diferencia entre ser humilde y tener miedo. Cuando están sin su ego, son humildes. No se necesita el miedo.
Sí, dense cuenta de que hay un Ser más grandioso que la personalidad que pueden aceptar como su propio yo. Ustedes llaman Dios a este Ser grandioso. El Ser Grandioso también está dentro de ustedes. El Ser Grandioso conoce el poder que tiene. Ustedes, que contienen al Ser Grandioso en su interior y no lo reconocen, todavía no conocen el poder que es suyo. Por eso, se sostienen con el ego. Si conocieran la solidez de Quiénes son Realmente, el ego también sería reconocido como lo que es y como un absurdo. ¿Quién necesita una pequeña espada de goma cuando detenta la poderosa espada del amor?
Hay diferencia entre una imagen y una sombra. Ustedes fueron hechos a imagen Mía, no como sombra Mía. No son una huella Mía. Son Todo YO. Todo lo que YO SOY, ustedes SON. Todo lo que tengo, ustedes lo tienen. Saben que en Nuestra conversación, cuando digo ustedes y Yo, es sólo una formalidad. Es YO, o en nombre de otra formalidad, es Nosotros. Somos Uno, aparentemente separado en pedacitos. La Realidad es que la Unidad no puede partirse, ni siquiera en dos.
Podremos decir, por conveniencia, que hay un pequeño tú y un Gran Yo. Sin embargo no hay tal pequeño tú. Sólo está el Gran Yo, o si prefieren, el Gran Nosotros. Sin embargo les cuesta asumir la idea de que no hay barreras. Les es más fácil cruzar barreras que no tener barreras en absoluto.
La vida relativa está dividida en dos. Es como si Estuviéramos separados. La Vida Relativa es toda Como Si. Es como si hubiera lo material. Es como si hubiera pesar. Es como si hubiera disputas. Es como si hubiera crímenes. Es como si hubiera emociones inferiores. Es como si hubiera guerra. La vida en el mundo ha sido una obra de teatro llena de dramas como si el amor se hubiera ido del escenario.
Amados, hay Un Amor, y es el Mío, o podríamos decir, el Nuestro. ¿Qué haremos hoy con toda esta Unidad del Amor? ¿Cómo lo cambiaremos en el mercado? O lo regalaremos como hemos distribuido las semillas sobre la Tierra. ¿No Seremos licenciosos del amor, cosechadores del amor, maestros del amor? ¿No seremos abundantes en el amor?
¿Acaso hay otro lenguaje que pudiéramos hablar, que no sea el amor?
¿No nos volveremos batidores del amor? ¿No batiremos el amor como chocolate caliente?
¿Qué haremos con Nuestro compromiso con el mundo? ¿Qué hace que la vida valga la pena? ¿Qué es lo que permanece? ¿Qué es lo que lleva la Tierra más cerca del Cielo? ¿Qué es lo que llena el corazón? ¿Qué queremos hacer en este corto tiempo en la Tierra?
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Gracias por incluir este enlace al publicar esta Carta del Cielo en otro lugar.
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Cartas deñ Cielo – Ayudan a los Seres Humanos a Acercarse a Dios y a sus propios Corazones-
Gloria Wendroff, escritora de Dios

