Dios dijo:
Por mucho que te gustaría que fuera así, nadie puede representar todo para todos, ¿estás de acuerdo?.
Sin embargo, puedes ser todo para Mí. No, mejor que eso, tú eres todo para Mí. No hay sombra de duda. Eres un sueño Mío hecho realidad. Me eres familiar. Yo te creé. No te creé para nada. Yo te creé en un cuerpo físico para ir más allá de tu cuerpo físico, pero también para que existas en la ilusión de lo físico durante un tiempo.
Creé aves para volar, peces para nadar, leones para rugir. Te creé para que te eleves. Yo te creé para que des lo que es tuyo para dar. No en algún momento, pero ahora. No más tarde sino antes. No mañana, sino hoy. A decir Verdad, sólo existe este momento entre palabras.
Incluso como el tiempo no existe verdaderamente, ustedes son el Horario Estelar, Amados. Pasas el rato en la fantasía del tiempo. Si vives en los Estados Unidos, puede que ya sea mañana en Hong Kong y así sucesivamente. El Horario de verano pretende existir en muchos estados y países, pero no en todos. ¿Cómo podemos decir que el Horario de Verano realmente existe y el Tiempo Estándar también?
Sin embargo, este tiempo inexistente hace girar al mundo. En el mundo, de buena gana o de mala gana, te guías por el reloj. El mundo te gobierna. Es decir, aceptas el dominio del tiempo. Tan errático como el tiempo puede ser, miras tu reloj; fijas la alarma; dices la hora con frecuencia. Por supuesto, no le estás diciendo nada al tiempo. El tiempo te lo dice a ti.
Es el tiempo el que te dice cuándo salir de la cama y cuándo ir a la cama. El tiempo da una idea falsa de la elevación y la puesta del Sol y la Luna, y dónde y cuándo debes creer dónde estás. De hecho, el tiempo tira de tu cadena. El tiempo se convirtió en un consenso que domina a todos.
Eres un súbdito del soberano llamado tiempo. Este soberano te hace apto para ser atado
¡No acusemos al tiempo como si existiera!
El tiempo es ficticio. Fue inventado para ser una especie de conveniencia, incluso mientras contradice la Verdad.
Por supuesto, no inventaste el Amanecer y el Atardecer, etc. No inventaste la existencia de la Noche y el Día. No creaste las Estaciones del Año. No has organizado la duración de un año. Has hecho del tiempo una forma de dar seguimiento. Defines todo esto, y luego aceptas todo esto como un método de contabilidad magistral.
En la Creatividad, escapas de la ilusión del tiempo. En el Amor, escapas de la ilusión del tiempo. Cuando escapas del tiempo, estás en el Infinito. El Infinito es realmente donde existes, y donde existes independientemente de lo que tú o cualquier persona pueda hacer de dónde estás o cuándo estás allí.
Lo que llamas el mundo real no existe. Lo que llamas el mundo real es donde no existes. La llamada palabra real es fingida. Sin embargo, se cree enormemente en lo imaginado. Tú confías en lo imaginado y te estableces en ello. Puedes usar la fantasía irreal como una insignia de honor. Harás cualquier cosa para probar su existencia. Sangrarás. Jurarás. Juras tu fidelidad.
Esta es la situación.
La luz existe al final del túnel. A decir verdad, naciste en el Infinito. No hay otro lugar para ti. Tú existes en el Infinito. Todo lo demás se disipa para hacer espacio para el Infinito, incluso mientras el Infinito no ocupa espacio alguno.
Yo soy el Dios del Infinito que tú y Yo compartimos y que siempre hemos compartido. Durante un tiempo duermes en la Tierra. De hecho, hay Belleza en la Tierra, así que recoge los capullos de rosa mientras puedas. Hay Alegría y un Propósito en esta apariencia de tiempo. No importa cómo tomas las cosas, eres bendecido.
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