Heavenletters™, acercando la Tierra al Cielo.
El Cielo está para llegar a cada alma en la tierra a renacer:
* Nuestra conexión con Dios *
* Nuestra creencia en nosotros mismos *
* Nuestra conciencia de nuestro servicio prestado a Dios *
* La paz en la Tierra *
Dios siempre nos acerca a él.
Heavenletter #2638 Tan Maravilloso como Tú
Dios Dijo:
Eres lo más lejano a alguien que mataría, y aún así, en un momento u otro, has tenido al asesinato en tu corazón. ¡Confiésalo ahora! Tú también quisiste que alguien desaparezca de la faz de la Tierra. Cuando te aferras a un rencor del pasado y no lo borras, lo que estás haciendo ¿no es, de hecho, diezmar a quien te ofendió?
Sé que a Mis hijos les gusta pensar que están sobre todo lo demás. Pero, amado, tú también has dicho mentiras. Has hecho una pequeña estafa por aquí o por allá. Has hecho trabajos mal hechos. Has defraudado a alguien un par de veces. Has conducido muy rápido, y has escapado de eventos que no querías enfrentar. Has confundido hechos. ¿No es cierto? Entre tú y Yo, ¿no es cierto?
Tan maravilloso como eres, la diferencia entre tú y aquellos que son acusados, aquellos que son aprisionados y aquellos que son ejecutados ¡puede ser más delgada que lo que a ti te gustaría pensar!
No es Mi voluntad que nadie hiera a otro ni que tome sus presuntas pertenencias ni todas esas cosas injustas. Tampoco es Mi voluntad que tú ignores a aquellos que son culpables por no tener tu visión. Alguien ha exteriorizado lo que tú sólo pensaste enojado. Amado, tú no eres ajeno a la tentación. Has sido tentado aquí y allí. Le diferencia entre tú y aquel que tú juzgas es que él se tentó y sucumbió. Actuó de acuerdo a sus pensamientos negativos mientras que tú no actúas conforme a ellos.
Te felicito. Estoy contento y agradecido. A todos los efectos, tú has hecho lo correcto. Tu hermano que fue hallado culpable no fue tan sabio y cayó. Quizás no era tan bendito como tú, y tú no eres tan virtuoso como te gusta creer. Quizás has sido afortunado. Verdaderamente fuiste afortunado al hacer elecciones menos extremas.
También está la idea de que quien daña, por más difícil que resulte aceptarlo, no cometió un acto malo de la manera en que el mundo lo ve, sino que más bien proveyó de un servicio. Al menos, puedes reconocer que estos actos deshonrosos te ayudan a reforzar tu deseo de ser honorable.
No pongo excusas, amado, porque no tengo excusas que poner. Yo no dejo a nadie a un lado. No importa qué crimen mundano ha cometido, yo no digo que quienes los cometen sean inservibles. No digo que sean despreciables. Ellos bien pueden, en sus ofensas, haber estado expresando la inutilidad que los controlaba. Si tuvieran una autoestima más elevada quizás hubieran tomando otras decisiones.
Amado, aquí está la idea de que no puedes saber qué es bueno y qué es malo. Puedes saber lo que tú prefieres, pero no puedes imponer una decisión. Puedes decidir por ti mismo, por supuesto, pero no puedes hacer pronunciamientos arrogantes de que cierta persona es buena y de que otra es mala. Tendrás pensamientos de esa índole, entiendo, pero debes guardarte esos pensamientos para ti.
Tú has tropezado y caído. Quizás te levantaste solo. Quizás alguien te levantó. Alguien más puede tropezar y caer y yacer ahí, y que nadie venga a ayudarlo. ¿Debes seguir de largo o analizar al hombre que permaneció en el barro sólo para condenarlo? No importa qué piensas de que él esté yaciendo ahí, él sigue siendo Mi hijo tanto como tú lo eres.
Translated by: Cecilia Ricardini
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Gloria Wendroff, Godwriter
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