DIOS DIJO:
Actualmente ya deben saber que no deben dejar que pequeñas cosas les molesten. Ustedes saben esto y, sin embargo, una y otra vez dejan que pequeñas cosas les molesten. Dejan que la misma pequeñez les moleste diez veces durante un día. Por supuesto, en aquel momento, no es una cosa pequeña para ustedes. Sea lo que sea que precipite el evento, sea cual sea su disfraz, la remilgada cosa pequeña que los molesta es su ego. A su ego no le gustaría admitir esto. Su ego, expresado o no expresado, pone el refrán en su mente: “No me puedes hacer esto”, o “Ellos no me pueden hacer esto”.
Ustedes podrán sentir que es su corazón el que está lastimado, pero es más bien su ego que está pisoteando a su corazón, empequeñeciéndolo y empequeñeciéndolos a ustedes, mientras jura todo el tiempo que ustedes se merecen alabanza y admiración. Su ego les dice a la cara que su importancia no tiene que ser pasada por alto. Su ego los pincha y se ríe disimuladamente a sus espaldas. Amados, los pinchazones y las burlas provienen de su ego. La imagen que su ego ha forjado está siendo hecha pedazos.
Lamento que alguien haya herido sus sentimientos. Lamento que no los valores más. Si, realmente no los valoran, ¿no es una bendición el saberlo y no sentirse más comprometido? Admita tampoco está pensando demasiado bien de la otra persona en este momento. ¿Cuán profunda fue su afecto, amado? La confrontación ha sido afrontada. Ahora está liberado de tener abierto un paraguas con agujeros sobre ustedes dos, actuando como si el mismo evitaría el que se mojen.
Amados, ustedes le dan demasiada importancia a lo que piensan que otros piensan de ustedes. Ustedes lo consideran como si fuese inviolable. Dejen que esta enorme cosa pequeña se vaya de su mente. ¿Qué es lo que ha cambiado realmente? Simplemente una idea que han tenido. Ahora una idea ha sido cambiada por otra. Otro ser humano está en falta por la valoración que les tiene a ustedes. ¿Hay más en ello que esto? ¿Cuánto hará temblar a la tierra este asunto? ¿Hay algo más que pasa? ¿Está irritado por una injusticia?
Amados, ustedes no tienen que creer en la valoración que otro hace de ustedes. ¿Qué es toda esta algabaría?
Nadie les ha quitado Mi amor. Nadie lo puede hacer. Nadie lo hará. ¿La opinión de quién importa más? ¿Ciertamente no valuarán la opinión de algún otro más que a la Mía? ¿No le están dando más importancia a su difamación de lo que le están dando a Mi amor? ¿Qué es lo que sucedió? Nada ha sucedido. La vida ha sucedido. Una ilusión ha sido intercambiada por otra. Una ilusión de consideración ha sido cambiado por una ilusión de menor consideración. ¿Qué tiene que ver esto con ustedes?
Sacúdanselo. Permanezcan con la mente en alto. Elévense por sobre las cosas pequeñas. No hagan que las cosas pequeñas sean grandes. Cuando todo ha sido dicho y hecho, nada en la vida temporaria va a sobrepasar a su felicidad. Ciertamente su felicidad no depende de lo que alguien pueda pensar de ustedes. Dense a si mismo alguna otra cosa en la que pensar. Dense a si mismos el amor en el que pensar. Que nunca les importe la desilusión. Desengáñense del desánimo. Pasen algún tiempo conmigo. PréstenMe atención. Yo voy a elevar su espíritu. No tienen que estar contrariados.
¿Qué haría falta ahora para que la felicidad penetre? Sea lo que sea que alguien más piense de ustedes, ¿cuándo se hicieron responsables de su felicidad o infelicidad? Si Yo puedo decir, ustedes son responsables. Solamente ustedes. Ustedes son responsables de agrandar algo pequeño.
Sea lo que sea que ha pasado o no ha pasado, todo está bien. Dios está en el Cielo y Dios está en la Tierra, y ustedes se hallan muy dentro de Mi corazón.
Traducción: Anita Manasse