Dios dijo:
Amado, sí, hay muchos momentos en la vida en los que haces bien en pararte delante y subir al podio. Esta no es la imagen que tuviste de ti mismo. Puede ser que te hayas parecido a ti mismo y a otros como un Clark Kent de modales apacibles y en absoluto como Superman. No tienes que ser Superman, sin embargo, es posible que tengas que encontrar tu propio camino incluso cuando la independencia no sea lo que más te guste.
Sin embargo, la manera en que te veo, está, por supuesto, más cerca de tu verdad. ¿Me concederás esto? Si digo que eres poderoso, incluso todopoderoso, ¿pensarás en lo que digo?
Tal vez has mantenido durante mucho tiempo una imagen de ti como un lindo gatito. Sin embargo, la vida puede exigirte que te sientes derecho y comiences a verte como un tigre salvaje en lugar del lindo gatito que crees que representas.
¿Cuántos de Mis hijos están levantando su mano en este momento preguntándose si Me estoy refiriendo a ustedes?
No es que tengas que recuperar tu poder como si hubieras descartado tu poder y nunca lo hubieras reclamado y nunca hayas querido ser poderoso. Puede llegar el momento en que la vida no lo deje a cómo te sientes. La vida se para ante ti y te dice inmediatamente que te levantes y bailes. La vida te dice que es el momento en que ya no puedes ser despreocupado y en caída libre en lo concerniente a tu vida. Creciste como persona tímida. De repente, ahora, te tiran al escenario.
Todos debemos crecer. Eres un adulto ahora. Es posible que ya no puedas dormir en tus laureles. Y, sí, no aceptes juicios de culpa ni para ti ni para nadie, para nada.
La culpa y la desesperación no son mantos que Mis hijos deben usar. La culpa y sus hermanos no son nobles y no son armarios para que nadie se esconda. La culpa no ha de salvar tu pellejo. Pobre de mi no debe ser tu estribillo. La culpa no es una palabra en la cual apoyarse. Eres un adulto ahora. Ahora eres responsable de ti mismo. Todos Mis hijos tienen lo que los hace crecer. Y todos crecen. No seas tímido en lo concerniente a cuánto debes crecer ¿Acaso no has querido siempre pararte más alto? Ahora, párate más alto. Siempre puedes tener piernas más altas de lo que creías posible.
Entiendo que estarías tan agradecido de recurrir a Mí. Sin embargo, la vida puede requerir que camines al frente.
Siéntate derecho. Ponte de pie. Entra en tu vocación. Tus padres y tus hermanos pueden haberte imaginado nada más que como un hermano tímido. Yo te veo como autoproclamado. Sea lo que sea que estés llamado a hacer, lo harás y lo harás bien. No tienes que menospreciarte.
Recuerda la confianza que tengo en ti. Tú eres Mi promesa al mundo, y Mis promesas se hacen realidad. No eres un cobarde. Eres fuerte y audaz. Conoce esto como un hecho.
Puede ser el momento de que te despiertes a la realidad, salgas de las sombras y empieces a revelarte a ti mismo. Simplemente, pudiste haber quedado atrapado en un lugar. Entonces, cuando sientas frío, encuentra un suéter o chaqueta o abrigo para ponerte. No te quedes afuera en el frío.
Amado, los cuentos de hadas se basan en la verdad y se hacen realidad.
Al mismo tiempo, cuando estás esperando para tomar un autobús, tiene sentido esperar cerca de una parada de autobús.
Que tengas un buen viaje.
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