El Silencio, Más Profundo que el Pensamiento
Heavenletter #5268 Publicada en: Abril 28, 2015
Dios dijo:
Intenta un día sin palabras, y verás que estarás más cerca de la Verdad. Las palabras son algo hermoso, aún así las palabras y la conversación a menudo toman control, como si la vida se llevara a cabo en palabras. La palabras pueden pavonearse y bailar a lo largo del escenario. Las palabras pueden competir entre sí, y los pensamientos originales pueden perderse en las palabras de la misma manera en que las hojas cubren los árboles en un bosque y puedes perderte.
Más profundas que las palabras son los pensamientos. Las palabras tratan de aproximar lo que los pensamientos quieren decir. Las palabras y los pensamientos son incompletos e y temporales.
A veces las palabras pierden significado o dicen lo contrario. El verdadero significado puede perderse en el ir y venir. A veces podrías querer embellecer las palabras, y estas bailarán fuera de la página del significado con que son percibidas.
En el mundo, muchas veces las palabras no son directas, y pueden ser tomadas de diferentes maneras. Las palabras pueden ser ruidosas, y también pueden tratar de ablandar lo que realmente es lana áspera. ¿Cómo puede ser suavizado lo que se llama malas noticias en el mundo? Las malas noticias no pueden realmente permanecer ocultas. Tienen que ser contadas al igual que el viento debe soplar. Desde el punto de vista humano, puede no haber ninguna manera que sea mejor. Desde fuera, ¿cómo puede ser borrada la angustia?
Y aquí el tiempo que no existe podría absolverse a sí mismo. En la ilusión del tiempo, el impacto disminuye. Tan discordante es lo que ves como la realidad y aún así no lo es, que te toma tiempo reconciliarte con lo que ves. Por lo tanto, la ilusión del tiempo te da la ilusión de que el tiempo lo borra todo. La marea lleva el mar a la costa, y la marea se lleva al mar lejos de la costa.
Nada en el mundo es permanente. Lo que llega a la Verdad es el corazón, incluso cuando el corazón pueda doler debido a la ficción. Nada es poseído. Nada está perdido. Una vida no puede perderse. Solo en la superficie de esta ficción llamada Vida en el Mundo puede algo parecer estar perdido.
Un libro se termina. Puede que no sepas dónde lo dejaste o dónde te quedaste. No hay un último capítulo. No hay más páginas qué leer. Y a pesar de ello, todo el tiempo, sólo hay una historia, y las historias no siempre resultan de la manera que quieres. Y cuando las historias satisfacen tus tus anhelos, incluso entonces, ningún libro realmente se termina. Hay una secuela o algo así cuando otra historia empieza, pues hay alma. Hay alma. Tú tienes un alma así cómo la tienen todos. Un alma que conservas. Un alma que es permanentemente tuya.
Mientras tanto deja que cada presencia en la Tierra sea una alegría para ti. Todo es una ilusión en el mundo. Todo en el mundo. La sorpresa ó conmoción es ficción. La felicidad delirante es ficción. El dolor es ficción. La Expectativa es ficción. Todo en el mundo es una ilusión bien aceptada, una ilusión sobre ilusión no importa qué tan real pueda parecer. Tú has llorado en el cine, incluso cuando sabías que era solo una historia.
Ahora, esta es la cosa. Incluso entre la ficción yace un presentimiento de la Verdad. Incluso entre la ficción suenan Campanas de Sabiduría y Verdad. Estas asintiendo. Ciertamente la ficción contiene un reino de Verdad. La ficción te habla de la misma manera que la ilusión del mundo te habla a tí.
Aún así ¿qué es lo que has aprendido? Es difícil de decir. Quizás aprendiste que hay sufrimiento y angustia y separación en la Vida en el Mundo, y que todo es una ilusión. Aún así el libro que lees y sostienes no parece prepararte para lo que está por venir.
No importa, tú te elevarás por encima del diario furor de la vida. Te encontraras a ti mismo donde realmente has estado todo este tiempo, y este lugar es Conmigo en Mí Corazón. Quiero decir que aquí es donde todos tus sueños se cumplen, aún así, a estas alturas, tus sueños ya no son los mismos. En todo caso, tendrás Realización y una Realidad mucho más rica que todos tus sueños anteriores jamás lo fueron.