Heavenletters™ Heavenletters™ - Acercando el Cielo a la Tierra
EL CIELO está aquí para lograr el despertar de cada alma sobre la Tierra:
*Nuestra conexión con Dios*
*Nuestra creencia en nosotros mismos*
*Nuestra conciencia de nuestro merecido compartir con Dios*
*Paz en la Tierra*
Dios está siempre acercándonos más a El.
CARTA #2319 – EL TREN QUE EINSTEIN OBSERVÓ – Abril 01, 2007
Dios Dijo:
El mundo relativo es el tren que Einstein observó. Viajas dentro de él y eres el observador. Eres el viajero, el observador y el viaje mismo. Y esto, Amados, es una parte mínima de ustedes. No lo abarca todo.
Hay campos que se extienden más allá de la aparente travesía del tren.
Hay grandeza. Hay un cielo y un contenido. Hay una Presencia que sobrepasa toda percepción. Hay una Presencia más allá de la percepción. Más allá de la percepción, está el saber y ustedes son la Sabiduría misma. Ustedes son Conciencia. Eso lo atesoramos. Ustedes son Conciencia extendida más allá de todo lo que puedan concienciar. La Conciencia misma es mayor que la suma de sus partes. Realmente, no hay división. Las partes símiles son un reflejo del todo. La Conciencia es una gran espiral de luz. Es más brillante y más deslumbrante que cualquier retrato del Sol. La Conciencia es como el círculo interno del Sol. Es un lugar hermoso de Sabiduría donde habitar. ¡Qué cálido y caluroso!
Te sientas en un columpio en medio del Sol y te meces a su vaivén y vas elevándote cada vez más. Te impulsas tan fuerte con tus pies que te alejas más allá del Sol. Por un breve instante, cuando te hallas fuera del centro del Sol, olvidas tu centro. Sobre el arco de tu columpio, te meces hacia atrás. Has estado inclinado dentro de la cámara interna del Sol. El eje es fuerte y es irrompible. Y sin importar qué tan alto te balancees y sin importar cuánto te alejes, permaneces siempre en el columpio y no podrás caerte nunca. Te has desprendido y sigues enlazado al mismo tiempo.
Estás columpiándote por ti mismo. Con el primer empujón, inicialmente, abres camino, también retornas. Sin importar qué tan lejos puedas llegar, estás en el camino desde donde partiste. Y cuando te balanceas en medio del Sol, la luz del Sol te absorbe. Estás absorto. Te volviste Uno con el Sol. El Sol puede parecer estar brillando sobre tu espalda pero también eres el Sol que brilla sobre ti mismo. Eres el Sol de Mi Corazón que irradia sobre la Tierra. La bellota aún no se desprende del árbol.
Tú vives en muchos niveles simultáneamente. Incluso si actúas hoy como un tonto, no lo eres. Incluso si estás idiotizado en el día de hoy, solo estás tomando parte del juego. Todos los días, tomas parte del juego. Solo es un juego. Estás jugando dentro de la vida. Si te desanimas o tropiezas, juegas una parte de un Juego Magnificente. Has entrado en él. Incluso si te sientes intimidado, has entrado en él. Incluso si piensas que eres un jugador más, eres una estrella de todo el universo.
Eres Mi estrella que brilla sobre la Tierra. No eres una piedra que arrojé. Eres una estrella tan brillante como cualquier estrella nocturna. Estás relacionado con todas las estrellas. El Sol es tu Estrella Madre/Padre. Y, sin embargo, no eres una estrella naciente o un sol naciente. Tú eres el Sol Mismo. Desde cualquier ángulo, eres la Estrella Más Brillante. Eres todas las Estrellas. Eres todos los Soles. Brillas de tal modo que todo el universo puede conocer el brillo de Dios sobre la Tierra. Sé Mi luz que brilla. Conviértete en ella. Conócela. Irrádiala.
Traducido por: Gloria Helena Restrepo C. yosoyjanaya [at] gmail [dot] com
!La Verdad Os Hará Libres! “El Reino de los Cielos se encuentra dentro de Ti” (Jesús El Cristo)
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