Podría decirse que Nosotros, tú y Yo, el Uno de Nosotros - ¿no es interesante cómo navegamos en el lenguaje? - Hablamos, nos comunicamos, o podemos decir comulgamos en un nivel más profundo que el lenguaje. En cierto sentido, podemos decir que el lenguaje en sí mismo es "mucho palabrerío".

Más profundo que el lenguaje - la Fuente del Lenguaje -- Tal vez podamos llamarlo prelenguaje. Podemos decir que la Fuente del Lenguaje es el Ser, y el Ser es poderoso en sí mismo. El Poder del Ser puede surgir como una vibración, por lo que se puede decir que la vibración es el precursor del habla. El habla es un complemento. El habla está escrita entre líneas.

En el mundo mismo, mucho es tácito y se entiende muy bien. Todo lo que un suspiro puede transmitir, la postura, una mirada a los ojos de alguien, de alguna manera los sentimientos transmitidos antes de las palabras y antes del pensamiento, más allá de los continentes, tal vez incluso más allá de la comprensión. No todo tiene que expresarse con palabras, sin embargo, una palabra está supuesta a ser una caricia en las ondas del aire.

Ah, podría decirse que Nosotros hablamos en silencio en Luz Dorada. Estoy tentado de decir en poderosos rayos , pero silentes y sin drama. No hay jadeo.

Lo que se sabe con certeza es que existe algo llamado comunicación que incluye la comprensión, pero que está más allá de descifrarlo.

Cuán conectada a la respiración está la comunicación hablada.

Por supuesto, todo entendimiento se conecta con el Alma -- desde y hacia las Almas. Alma al alma - mucho más allá del intelecto. El intelecto puede considerarse una mera jerarquía.

Amados, toda comunicación surge de un silencio de quietud. Por supuesto, en lugar de decir que las personas se comunican, podemos decir que la comunicación es de una cima de montaña a otra.

Puede ser como si las palabras también se comunicaran desde la punta de tus dedos. Ciertamente, la comunicación también incluye la comunicación de ti mismo hacia ti mismo y de ida y vuelta con o sin acuerdo.

La comunicación puede ser escuchada. Esto es como una puerta que golpea, o como una puerta crujiente que necesita engrasado. Existe un hablante o un transmisor, aquello que se transmite, y un oyente que recibe el mensaje o no.

Con qué ternura se debe comunicar y con qué gentileza se debe recibir. Un orador y oyente se entregan en la medida de lo posible.

Los bebés balbucean. Algo se transmite aunque el mensaje no se puede señalar con exactitud. En cierto sentido, los adultos también balbucean. Sin embargo, una mano se extiende para tocar a otra.

Mi Llamado es: Escúchame, Escúchame”.

En un sentido real, un balbuceador también dice: "Escúchame". Ten en cuenta que Yo estoy aquí, solicitando ser escuchado, ser visto, ser reconocido, esperando un asentimiento tuyo que diga: ‘Oh, lo sé. Sé que estás aquí y te hago lugar en mi corazón’".

Es tan difícil llegar a otra Alma y tocar el corazón de otro como si tu vida dependiera de ello. Lo hace. Sí, dice el corazón a la simpleza de la comprensión. No tiene ciencia.

El Godwriting no es una ciencia ni puede serlo. Un artista no pinta por números. Su visión es invisible e innegable. Se derrama. Se elige un color aquí y no otro. El artista no sabe de antemano de hecho qué va a pintar y cómo se verá. Existe un "tengo que" para el arte dentro del artista que proviene de algún lugar. El Godwriting es un arte. No hay otro objetivo más que sí mismo.

No preparo lo que voy a decirte y, sin embargo, lo digo. Hablo al aire libre, por así decirlo. De improviso -- y sin embargo, todo es conocido. El Godwriting proviene de un pozo en el que sumerges un cucharón invisible y bebes.

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